Tras la detención de Víctor Aular, exvicepresidente de Finanzas de Petróleos de Venezuela, nuevos detalles salen a la luz sobre la trama de corrupción en PDVSA.
En la confesión realizada al Ministerio Público, Aular vinculó al exministro Rafael Ramírez con el exalcalde de Guanta, Jhonnathan Marín.
«Quiero informar sobre algunas tramas de corrupción que se están investigando con el señor Jonnathan Marín. En 2016, mientras me encontraba haciendo unos estudios en Nueva York, él me contactó vía telefónica. Me reuní con él en el hotel Four Seasons y me dijo que mi teléfono se lo había dado el ministro Rafael Ramírez», expresó.
En ese orden de ideas, comentó que Marín le comentó que necesitaba una «asesoría» para un proyecto petrolero en Ecuador.
«Él me dijo que estaba en ese momento en Nueva York porque formaba parte de un equipo político que estaba trabajando con Rafael Ramírez para una eventual precandidatura presidencial.
Él me explicó específicamente cuál era el proyecto para el cual necesitaba financiamiento. Era una empresa de él que se llamaba Construcciones y Servicios Amunsa, cuya representante legal era Patricia Amundarain», indicó.
¿Qué pasó con Jhonnathan Marín?
De acuerdo con documentos judiciales referidos por The Associated Press, entre 2015 y 2017, Jhonnathan Marín habría ordenado al jefe de compras de Petrocedeno (una empresa conjunta de PDVSA con la francesa Total y la noruega Equinor) que otorgara contratos por valor de decenas de millones de dólares a empresas de su socio no identificado.
En abril, Jhonnathan Marín se entregó discretamente a las autoridades en Miami. Esto bajo el único cargo de asociación para cometer un delito contra Estados Unidos, que conlleva una pena máxima de cinco años de prisión. Quedó en libertad el mismo día al pagar una fianza de 100.000 dólares, según actas de la corte.
Además, confesó que aceptó un soborno de 3,8 millones de dólares para influenciar a funcionarios de empresas conjuntas de PDVSA con Chevron y empresas europeas, rusas y chinas.
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