El dirigente opositor recordó que cinco jefes de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) han sido asesinados en el último año en Venezuela y se refirió a la relación de Nicolás Maduro con estos grupos irregulares
El dirigente político de Primero Justicia, Julio Borges, aseguró que en el país están presentes al menos 28 grupos armados irregulares y muchos de ellos actúan como Estado en varios territorios del país.
En el texto se refirió a la relación de Nicolás Maduro con estos grupos irregulares y recordó el reciente atentado del que presuntamente fue víctima Iván Márquez en el país y sobre el que todavía no se conoce el desenlace. Destaca que la convivencia del gobierno de Maduro con estas organizaciones debe ser inaceptable para las democracias de la región.
“Son al menos cinco jefes de las disidencias de las Farc que han sido asesinados en territorio venezolano, en medio de una lucha entre grupos criminales por el control de pasos fronterizos y el negocio del narcotráfico.
Venezuela se ha convertido en un santuario para estos grupos, una especie de refugio seguro, donde nuestro país sirve de patio no solo para planificar sus actividades terroristas, sino para enriquecerse por medio de actividades como el narcotráfico, la minería ilegal, la trata de personas, el secuestro y cobro de soborno”, denunció.
Asimismo, citó el más reciente informe de Fundaredes, el cual detalla que en Venezuela confluyen 28 grupos armados irregulares, “entre los que destacan diversos frentes de las disidencias de las Farc y el ELN (Ejército de Liberación Nacional), y organizaciones internacionales del narcotráfico como el cartel de Sinaloa”.
De igual forma, Borges sostuvo que Maduro busca llenar de miedo a los venezolanos con estas alianzas. “Maduro se vale de la alianza con este sistema delictivo para amedrentar y llenar de miedo a los venezolanos y así impedir una organización popular que derive en un cambio político.
En tercer lugar, fortalece su posición de negociación en América Latina porque Venezuela abre sus puertas para todo aquel que cometa delitos contra los Estados democráticos de la región”, dice el dirigente opositor.
Considera que esta relación representa un riesgo para toda la región y, en ese sentido, llamó a los países a pasar de un enfoque declarativo a uno de acción.
“Se requiere una posición de fuerza de todas las democracias de América. Una posición que le ponga un freno a Maduro y le delimite exhaustivamente el campo de juego político, partiendo de una idea muy simple y concisa: sus vínculos con el narcoterrorismo son inaceptables y ponen riesgo la convivencia democrática de la región”, pidió.
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