El ex presidente de Exploración y Producción de Petróleos de Venezuela (PDVSA), Juan Szabo, está al frente del Observatorio de Energía y Ambiente del IESA, que en su primer boletín señala la posibilidad de que el gobierno de Estados Unidos en breve plazo adopte alguna medida de flexibilización de las sanciones que impuso en 2019 a Petróleos de Venezuela (PDVSA) impidiéndole exportar hacia el mercado norteamericano.
“Si las fuentes informales resultan estar en lo cierto, la licencia a Chevron y probablemente seguida a otras empresas, serán emitidas sin demora por la OFAC (Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro)”, señala el reporte emitido por el referido observatorio. “Venezuela es la única región petrolera del mundo que produce una sexta parte de su potencial en términos de reservas; por lo tanto, bajo condiciones políticas legales, fiscales e institucionales, pudiera incrementar su producción en 3 millones de barriles diarios en el mediano ylargo plazo, un evento parteaguas bajo cualquier cristal que se mire”, agrega.
Indica Szabo en su análisis que en el gobierno de Joe Biden hubo un cambio luego de la decisión adoptada por la Organización de Países Exportadores de Petróleo junto a otras 10 naciones productoras de hidrocarburos, encabezadas por Rusia, que bajo el mecanismo llamado la OPEP+ decidió recortar la producción en 2 millones de barriles diarios a partir de noviembre para evitar que bajen los precios del crudo.
“Estados Unidos parece haber descontado la lealtad de sus, hasta ahora considerados “amigos” en la región del Golfo Pérsico, en base a la decisión de la OPEP+ de recortar los objetivos de producción, justo antes de las elecciones de medio término que definirán el mandato del Biden y su administración, y esta decisión parece haber acelerado la presión sobre Venezuela, en sus dos bandos, para ponerse de acuerdo en algunos elementos claves para dar el paso de retornar a los mercados petroleros occidentales”, señala Szabo.
El reporte indica que en caso de que se otorgue una flexibilización en las sanciones, podría comenzar una nueva etapa para la industria petrolera venezolana con acceso al mercado norteamericano de los crudos venezolanos, pero todo dependerá del marco institucional que finalmente se le ofrezca a las empresas transnacionales y se aclaren aspectos referidos a recuperación de inversión, deuda y pago de dividendos.
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