El opositor venezolano Juan Guaidó aseguró que Citgo, la filial de Petróleos de Venezuela (PDVSA) en EEUU y el principal activo del país sudamericano en el exterior, «sigue protegida» por el gobierno estadounidense, al tiempo que recordó que las deudas contraídas por la petrolera con sede en Houston, Texas, se deben a las políticas de expropiación iniciadas por Hugo Chávez, que luego continuó Nicolás Maduro.
Afortunadamente Citgo sigue protegida, de hecho esa medida que dictó un juez la detuvo producto de una apelación que hiciera la junta directiva actual de Citgo para seguir protegiendo los activos que pusieron en riesgo Maduro y Chávez», dijo Guaidó en entrevista con el medio colombiano Blu Radio.
El opositor, que se encuentra en EEUU luego que tuviera que huir de Venezuela ante las amenazas de cárcel por parte del régimen, aseveró que «el objetivo es mantener Citgo, como hemos hecho durante cuatro años», y enfatizó que la filial de PDVSA «sigue siendo de los venezolahos hoy».
Sin embargo, Guaidó llamó la atención sobre los reclamos de los acreedores de Venezuela. «Hay una crisis en puerta que son miles de millones de deudas producto del mal manejo de la dictadura».
A inicios de esta semana, el juez estadounidense Paul B. Matey suspendió de forma temporal el embargo de Citgo, luego que acatara una moción interpuesta por la Junta Directiva ad-hoc de PDVSA, que es reconocida por el gobierno y el sistema de justicia de EEUU.
Un eventual embargo de Citgo, el principal activo de Venezuela en el extranjero, y la venta de la empresa, serviría para que acreedores cobren las deudas millonarias al Estado venezolano.
La decisión del juez Matey otorga a Citgo más plazo para lograr una mediación entre el régimen de Nicolás Maduro, la junta administradora ad-hoc de PDVSA, designada por el gobierno interino de Juan Guaidó, y los acreedores.
A petición de los demandantes, los tribunales, bajo el argumento del «alter ego», consideran que Citgo es una representación de Venezuela, de la cual puede cobrarse la deuda.
Guaidó acusó al chavismo de «dilapidar» los activos venezolanos en los últimos años. Recordó el «remate» de la Refinería Dominicana de Petróleo, que el régimen vendió al gobierno de ese país por $88,1 millones. Destacó Guaidó que esa negociación estuvo a cargo del exministro de Petróleo, Tareck El Aissami, defenestrado ahora del régimen luego que salieran a la luz pública varias tramas de corrupción en PDVSA en las que están involucrados varias personas muy cercanas al ahora exministro, del cual incluso actualmente se desconoce su paradero.
«Citgo posee lamentablemente muchas deudas por las políticas de expropiación de Chávez, de endeudamiento, luego Maduro, incluso la emisión de bonos con colateral. Eso forma parte de la propaganda de atacar y perseguir a la oposición», expresó Guaidó.
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