El robo y la reventa de gasolina se han convertido en el oficio mas lucrativo en el otrora país petrolero, sin embargo, el país teme quedr paralizado y que no se distribuyan alimentos.
Muchos temen que el desabastecimiento impida la distribución de alimentos a supermercados o a la movilización de vehículos imprescindibles para el mínimo funcionamiento del país, mientras prolifera la venta ilegal de gasolina y las estampas de esperas interminables en las estaciones de servicio no suelen tener final feliz. En ocasiones, violento.
Los agricultores claman ayuda ante la pérdida de cosechas al no poder transportarlas,y los productores manifiestan problemas para movilizar otros alimentos de primera necesidad.
También se ha visto afectada la distribución de agua potable, otro bien codiciado en Venezuela ante el colapso de la red pública de acueductos.
El “bachaquero” de la gasolina
La reventa de gasolina como el narcotráfico, se origina en la pobreza y la necesidad desobrevivir. Ña mayoría de los bachaqueros como los llaman recordando el trabajo de hormigas, percibe ingresos menores a los 10 dólares por mes -lo que les deja en el umbral de la miseria, según la ONU-.
Quienes tienen autos se dedican a tratar de llenar sus tanques varias veces cada día y venderán la gasolina en el mercado negro, pese al estricto control que impuso el Gobierno de Nicolás Maduro a la distribución de los combustibles.
El Gobierno venezolano achaca a las sanciones de Estados Unidos, el nuevo salvavidas de sus economías en una Venezuela que atraviesa la mayor crisis de su historia moderna.
En otras épocas, los “bachaqueros” venezolanos captaron y luego vendieron con sobrecostes alimentos, jabones o desodorantes, entre otros productos de primera necesidad. “Semanalmente puedo vender unos 50 litros (de gasolina) al que la necesite”, dice a Efe Gabriel, nombre ficticio de un vendedor informal que relata su historia bajo condición de anonimato.
“Pero (solo vendo) a gente de confianza, gente que me conoce y puede conseguir la gasolina”, apunta en alusión al alto costo de reventa.
La gasolina más barata del mundo
En Venezuela, el país con las mayores reservas de petróleo en el planeta, la gasolina es tan barata que con apenas un dólar se pueden llenar los tanques de más de 1,5 millones de autos compactos. Los venezolanos suelen repetir como un mantra que tienen la gasolina más barata del mundo, pero deja de serlo cuando un “bachaquero” se la vende en un dólar por litro a unos usuarios acostumbrados a que se la regalen.
Así, llenar el tanque de un compacto rondaría como mínimo los 40 dólares, un monto inalcanzable para muchos en Venezuela, donde el salario mínimo y las pensiones superan por poco los dos dólares mensuales.
Los “bachaqueros” contrabandearon gasolina por años entre Venezuela y Colombia a través de los pasos fronterizos del occidental estado de Zulia, una región en la que la crisis venezolana se expresa con mayor crudeza. Este negocio ilegal ocurría a la luz del día y a la vista de todos, sin que los esfuerzos por atajarlo surtieran efecto, pero el desplome de la producción petrolera y de las capacidades refinadoras de Venezuela puso este trasiego de combustible en la mira del Gobierno, que redobló las medidas para eliminarlo.
Algunos casos conocidos
Según datos oficiales, en la década pasada Venezuela perdió entre 10.000 y 15.000 millones de dólares por año por causa del contrabando hacia Colombia. Este fenómeno era, hasta hace poco, desconocido en la capital venezolana, donde hay cientos de gasolineras y el suministro fue siempre regular, con la excepción de un paro petrolero en el año 2002 que dejó en mínimos el bombeo y la capacidad refinadora de la estatal PDVSA.
Vender combustible de forma ilegal en Venezuela tampoco supone grandes beneficios y tiene sus riesgo La Fiscalía venezolana informó de la detención de un grupo de personas acusadas de reventa de gasolina, entre ellos varios militares destacados en el estado de Zulia.
Una comisión de efectivos militares del Comando de Zona número 62 de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) frustró este martes 21 de abril el hurto de combustible en las instalaciones de la planta Sisor, perteneciente a Petróleos de Venezuela (Pdvsa), ubicada en la ciudad de Puerto Ordaz, estado Bolívar.
La Guardia Nacional Bolivariana ha sido acusda de promover o avalar la venta ilegal de gasolina, pero en los últmos días se ha dedicado a detener a los bachaqueros. Incautó 7 tambores de 200 litros, 5 envases con capacidad de 70 litros, otros 10 con capacidad de 20 litros y 2 carruchas metálicas para trasladar los tambores.
El comandante de Zona número 62, G/B Adolfo Rodríguez Cepeda, informó que efectivos militares adscritos al Destacamento número 625 vieron a un aproximado de 15 personas en un área de la empresa, quienes al notar la presencia de la comisión militar emprendieron la huida dejando abandonado varios envases donde pretendían cargar de gasolina.
El gobernador Omar Prieto informó este jueves 16 de abril, desde El Moján, municipio Mara, detectaron “una mafia” en las estaciones de servicio destinadas para despachar combustible a vehículos y unidades para el traslado de alimentos y medicamentos en la contingencia por el Covid-19 en la región “que ha causado malestar en la población”.
La Mancomunidad Policial los arrestó junto a un adolescente, informaron este 15-A.
En flagrancia resultaron detenidos dos hombres y un adolescente por extracción ilícita de combustible en una estación de servicio en la parroquia Cecilio Acosta del municipio Maracaibo.Los adultos son hermanos y quedaron identificados, por las autoridades, como Víctor y Jesús Mora Montenegro, de 30 y 19 años.
Al momento de la detención se incautaron tres pimpinas de 20 litros y dos de 8 litros contentivas de gasolina, seis envases vacíos de 5, 18, 30 y 50 litros, una bateria marca Duncan, tres bombas de gasolina eléctricas de vehículo con aproximadamente 20 metros de cable y 20 metros de manguera.
La venta ilegal no es solo de pobres
Algunos millonarios tambien se han dedicado a la venta ilegal de gasolina, como es el caso de Jesús Ramón Soto, residente en la lujosa y exclusiva zona de Cerro Verde en la gran Caracas, quien montóuna estación de servicio clandestina en su mansión.
Un tribunal decidió el bloqueo de las cuentas de Jesús Ramón Soto, así como la prohibición de enajenar y gravar bienes.
El Tribunal 36 de Control del Circuito Judicial Penal del Área Metropolitana de Caracas dictó medida de privación judicial preventiva de libertad a Jesús Ramón Soto, por la presunta comisión de los delitos de contrabando de extracción, tráfico ilícito de material estratégico y legitimación de capitales. El primero previsto y sancionado en el artículo 59 de la Ley Orgánica de Precios Justos, y los dos siguientes en la Ley Contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo, artículos 34 y 35 respectivamente.
Tenía una gasolinera clandestina en su vivienda de Barutay le fueron decomisados tres mil litros de combustible..
Arrestados en Perijá trasladando un camión con mil litros de gasoil
En la frontera con Colombia, y con participación de las comunidades indígenas y las mafias extranjerasse dan casos insólitos de contrabando, como eldeun camión cisterna con agua que alser revisado resultó lleno de gasoil.
Oficiales del Cuerpo de Policía Bolivariana del estado Zulia (Cpbez) detuvieron en flagrancia a Levi Vaker (59) y a José Nava (37) cuando transportaban de manera ilegal una carga de gasoil, hecho registrado por la avenida principal Calle Larga, parroquia San José, municipio Machiques de Perijá.
Los policías adscritos al Centro de Coordinación Policial Perijá en labores de vigilancia y patrullaje por la zona observaron un vehículo marca Ford, gris, modelo F350 de plataforma con barandas placas A70AV8J que se desplazaba a alta velocidad.
Al conductor desconocer la voz de alto se produjo una persecución que culminó con la detención de Vaker y Nava.
Durante la inspección se pudo observar que en la parte trasera llevaban un tanque para agua de 1000 litros contentivo en su interior combustible tipo diesel (gasoil) al solicitarles los documentos del vehículo y del combustible manifestaron no poseerlos.
Pueblo comiéndose al pueblo
Mientras los pozos petroleros están practicamente paralizados, la gente está desesperada entre la pandemia, el hambre y la desesperación. Gabriel, un vendedor de gasolina en un barrio de Caracas dice que tiene una red de contactos que se la van llevando, pero al final, lo que recibe apenas le alcanza para comer.
“Sería bueno que se normalizara (el suministro de combustible), porque (la situación) no está bien para ninguno -concluye Gabriel-. Prácticamente el pueblo se está comiendo al pueblo”.
NotiVeraz