Venezuela importó 13.500 toneladas de carne de cerdo que proviene de la región de Rusia con mayor cantidad de denuncias vinculadas con la epidemia sanitaria.
Al parecer la proteína porcina fue adquirida al muy conveniente precio de 11 millones de euros.
Sin embargo, la ganga podría configurar un drama sanitario y social sin precedentes para toda Latinoamérica ya que proviene de una de las zonas con más denuncias de fiebre porcina africana de Rusia.
Esta enfermedad es mortal para los cerdos, no para humanos, y no tiene ningún tratamiento curativo, siendo muy contagiosa a través de los propios cerdos, jabalíes, ropa de operadores, carne infectada, heces de las personas o animales que la consumieron, resiste temperaturas y ph extremos.
China, que tenía el 50% del rodeo porcino mundial el año pasado, perdió la mitad, es decir que hoy tenemos un 25% menos, en 2020 faltaran 20 millones de toneladas cuando el comercio de todas las carnes en los últimos años fue del orden de 29 millones de tn, imposible de cubrir. Y la epidemia no terminó, sigue su curso expandiéndose en Asia y Europa.
La enfermedad llegó a China desde Rusia, origen también de los brotes actuales en Europa.
La carne proviene de Korocha, Belgorod, epicentro de algunos de los brotes recientes más importantes de esta enfermedad en Rusia. Si se dispara y es muy fácil que esto ocurra ya que los servicios sanitarios de ese país están afectados por la crisis generalizada del mismo, los efectos serán letales inicialmente para los pequeños productores familiares y como viene ocurriendo se expandirá a la producción comercial.
Al no haber barreras naturales que puedan conternerla, países como Brasil, potencia mundial en este rubro, México o Argentina que está despegando en el mismo, serán profundamente afectados tanto en esta producción como en la de granos de los que se alimentan.
NotiVeraz