El gobierno de Bonaire ordenó a Petróleos de Venezuela (Pdvsa) vaciar los tanques y oleoductos en su terminal BOPEC de 10 millones de barriles, debido a los riesgos ambientales que implica la existencia de recipientes con crudo en aguas de la isla.
La agencia Reuters citó un comunicado emitido por la Inspectoría del Medio Ambiente y Transporte (ILT) de Bonaire, el cual señala que Pdvsa no tiene proyectos de mantenimiento.
Destaca que eso se debe a la falta de financiamiento. «Esto genera un riesgo de fugas», indica.
“El ILT considera esto inaceptable y está tomando las medidas necesarias para eliminar riesgos”, dijo el organismo.
La medida es el último golpe a la red de refinación y logística de petróleo de Pdvsa en las islas del Caribe holandés. El contrato de la compañía para operar la refinería Isla de Curazao expiró y el gobierno de Aruba tomó el control de la refinería. La misma estaba a cargo de la filial de Pdvsa, Citgo.
Tanques y muelles en mal estado
ILT indicó que hay cinco tanques en la terminal llenos de fuel oil. BOPEC informó en julio que el techo flotante de un tanque tenía una fuga. «Esto podría causar un derrame en caso de fuertes lluvias». Agregó que los muelles de la terminal estaban en tan mal estado que los barcos no podían cargar ni descargar petróleo.
A principios de este año, la Refinería di Kursou (RdK), la empresa estatal de Curazao propietaria de la refinería Isla, trató de incautar BOPEC con la intención de venderlo para cobrar la deuda de Pdvsa.
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