A pesar de que, luego de haber ejecutado un operativo que, supuestamente, habría derivado en el supuesto desmantelamiento de la agrupación criminal conocida como el Tren de Aragua, una de las más temidas de Venezuela, recientemente, el régimen madurista habría intentado vincular a esta organización con líderes opositores.
Supuestamente, la intención de los grupos adversos al madurismo sería generar «violencia» en Venezuela.
Es importante mencionar que, en un momento, Yván Gil, canciller de Venezuela, habría tachado de «ficción mediática» la existencia de la agrupación criminal, ante los numerosos reportes de actividad de la banda fuera de Venezuela.
Sin embargo, la narrativa cambió, luego de las elecciones del pasado 28 de julio, en las cuales, las autoridades electorales venezolana proclamaron a Nicolás Maduro como «ganador» de la contienda. Ahora el régimen aseveró que el Tren de Aragua sigue existiendo y que su líder, el fugitivo Héctor Rusthenford Guerrero, alias El Niño Guerrero, es un agente de Estados Unidos.
«El Niño Guerrero dirigió, personalmente, parte de los desmanes y la violencia criminal del 29, 30 y 31 de julio«, aseguró el mandatario, en referencia a las protestas contra su reelección.
Además, sentenció: «Todo el operativo que se hizo mundial para declarar al ‘Niño’ Guerrero terrorista formaba parte de una fachada para taparlo, chantajearlo, obligarlo a sumarse al gobierno de Estados Unidos en la agresión contra Venezuela».
Vale mencionar que, adicionalmente, Maduro responsabilizó por la violencia a la líder opositora María Corina Machado y a su rival en los comicios, Edmundo González Urrutia, y pidió cárcel para ambos.
Redacción con información de AFP
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