El triple homicidio ejecutado contra una familia de venezolanos que viajaba el pasado lunes cinco de agosto abordo de un autobús desde Lima hasta Cusco, en Perú, pudo ser motivado por un caso de xenofobia, según las primeras investigaciones adelantadas por las autoridades policiales de ese país.
Uno de los familiares de estas tres personas, mediante sus redes sociales, denunció que el homicida, al parecer, es funcionario policial y que desde el terminal de pasajeros donde embarcaron el expreso, el sujeto los miraba con desprecio y mucho repudio.
Sostiene que durante el trayecto, se levantó de su puesto y sin mediar palabras disparó contra Vilma Cárdenas Liendo, de 47 años de edad, su pareja Rafael Bautista Piña (42) y el joven Tony Piña Cárdenas (18), quien jugaba baloncesto y tenía un futuro prometedor en ese deporte.
“Tengo pruebas. Estaban en el terminal grabando videos para enviarlos a mi familia en Venezuela. En uno de esos videos sale su cara (asesino) llena de odio”, manifestó el denunciante según reseñó en su portal web el Diario 2001.
Tras el suceso, el principal sospechoso fue detenido por autoridades policiales quedando identificado como Salomón Quispe Mamani, quien presuntamente, pertenece a un organismo de seguridad, sin embargo, esta información no ha sido confirmada.
La cuarta víctima del atentado, una niña de ocho años de edad, permanece bajo cuidados en el Centro de Emergencia Mujer, donde está recibiendo apoyo psicológico. El ataque ocurrió en el segundo piso del expreso, donde se produjo una acalorada discusión antes de los disparos.
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