María Corina Machado, coordinadora nacional de Vente Venezuela, y el candidato presidencial de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), Edmundo González, lograron una multitudinaria concentración en el estado Táchira a pocos días de celebrarse las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio.
Mientras la oposición celebraba su masiva manifestación, Nicolás Maduro se quejaba en un video sobre la aparente falta de entusiasmo en una plaza de San Cristóbal, capital de esa región. El líder socialista, quien busca su tercera reelección el próximo 28 de julio, se autodenomina “el gallo pinto” y no escatima en burlas hacia su rival, a quien llama “viejo decrépito”.
Sin embargo, las encuestas no favorecen a Maduro. Por primera vez en 25 años de gobierno chavista, la ventaja del candidato opositor supera los 20 puntos porcentuales. Machado comenzó a hablar de una posible “transición”, aunque el chavismo se muestra reticente ante esa perspectiva.
En ese sentido, el gobernador del Táchira, Freddy Bernal, no logró organizar un evento multitudinario para el líder socialista. Aunque insiste en que la derrota es impensable, reconoce que, en caso de perder, Maduro supuestamente actuaría de manera democrática. “El pueblo venezolano no se suicida, cada vez que hemos perdido, hemos entregado”, dijo.
No obstante, Bernal también advierte sobre las consecuencias de un eventual gobierno de derecha. A su juicio, la oposición tendría que lidiar con una situación compleja y “no no nos aguantaría un año”. “Con 20 gobernaciones, 220 alcaldías y el poder popular, ¿seguiríamos siendo oposición? Imagino una dirigencia aguerrida en las calles, enfrentando un gobierno fascista que amenazaría con privatizar la salud y la educación”, indicó.
Al mismo tiempo, Bernal sugiere que Machado debería enfrentar cargos por traición a la patria debido a su supuesta incitación a la violencia.
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