«El cáncer no espera y tampoco juega», se leía en letras mayúsculas en una de las pancartas de madres de niños recluidos en el servicio de oncología del Hospital Universitario Pediátrico Agustín Zubillaga (Hupaz).
Reclaman que el viernes renunció el hematólogo y temen quedar en lista de espera para el tratamiento de la mayoría que padece leucemia. Le entregaron la solicitud a la directiva y aspiran que puedan responder a la brevedad posible.
Según Yarianny Mendoza fueron atendidos por la doctora, Miriam Lucena, directora del pediátrico, quien les prometió que antes del viernes van a resolver este problema y podrían mediar con el especialista, para que reconsidere su posición. «Pero lo que preocupa es la posibilidad de que los niños sean trasladados a la unidad del Hospital Pastor Oropeza. Eso la congestionaría», señala asustada.
Confirma que ayer estaban 18 niños hospitalizados en el Hupaz y la mayoría con diagnóstico de leucemia, quienes ameritan al especialista en hemato oncología. «Es tan delicado que ayer iban a ingresar 5 pacientes a recibir su quimioterapia intratecal, pero hubo inconveniente», lamenta que no se pudo cumplir ese tratamiento aplicado en la médula por falta del especialista.
No quiere pecar de pesimista y tiene fe de que pueda solventarse, porque la próxima semana a su hijo de 4 años le corresponde este tipo de quimioterapia. De seguir el problema, teme que pase a lista de espera. «Por eso queremos que vuelva el hematólogo, quien conoce todos los casos y es preciso al emitir los diagnósticos», señala extrañando el profesionalismo del doctor Robert Andrade.
Neria Gutiérrez es madre de una niña, quien también es tratada por leucemia. Su voz se llena de fuerza porque además de pedir que continúe el mismo hematólogo, insiste en los problemas en este servicio que van desde falta de insumos, algunos colchones en mal estado hasta deficiencias en la dieta.
Claman por el regreso del hematólogo y evitar más lapsos de espera para tratar la enfermedad.
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