Millonarias propiedades de Raúl Gorrín en Miami no podrán ser subastadas por ahora

El pasado domingo 15 de enero, el periodista de AP News Joshua Goodman, informó en redes que representantes legales del presidente de Globovisión, Raúl Gorrín, lograron proteger parte de su fortuna en Miami del embargo de una víctima estadounidense de los rebeldes de las Farc.

A traves de su cuenta de Twitter, Goodman explicó que varias propiedades de Gorrín serían subastadas el próximo martes 17 de enero por decisión del juez.

«Los alguaciles federales iban a subastar el 17 de enero propiedades por valor de 6,2 millones de dólares para satisfacer una sentencia ganada por el hijo de un diplomático colombiano asesinado por las Farc, ya que la Ley Antiterrorista permite a las víctimas estadounidenses de organizaciones terroristas extranjeras designadas -como las Farc- reclamar daños y perjuicios en los tribunales estadounidenses mediante la incautación de los activos de los grupos terroristas (o sus aliados) en EEUU. Un juez federal dictaminó el pasado mes de abril que Gorrín era un «agente e instrumento» de las Farc», indicó.

Este fallo se basó en el testimonio de un exempleado del Departamento del Tesoro, que dijo que la presunta participación de Gorrín en un esquema corrupto de divisas de Venezuela ayudó indirectamente al grupo terrorista extranjero, pero la orden judicial que embargaba la propiedad en nombre del demandante Antonio Caballero, inexplicablemente, nunca se desprecintó transcurridos 30 días, como es preceptivo. Y el abogado de Gorrín, Howard Srebnick, aprovechó el error.

«En una declaración jurada, Gorrín afirma que se enteró demasiado tarde de la venta de otras dos propiedades en Miami, incluido un apartamento en Fisher Island valorado en más de 34 millones de dólares. También negó haber sido nunca un agente o instrumento de las Farc, un argumento que nunca tuvo oportunidad de esgrimir ante el tribunal», agregó.

El apartamento de Fisher Island y otro en la Porsche Design Tower, valorados en 14 millones de dólares, son ahora propiedad de sociedades de responsabilidad limitada pertenecientes a Caballero, pero la orden del juez le impide venderlos. La subasta pendiente de las otras siete propiedades que aún pertenecen a Gorrín también está «suspendida».

El juez Moore, en su orden de bloqueo de la venta, dijo que el abogado de Caballero «ocultó» información a Gorrin, ya que cuando el abogado de Gorrín preguntó, nunca se le informó de la orden que determinaba que Gorrín era un agente de las Farc, por lo que no podía impugnarla.

Pese al retraso, Goodman destacó que «sin duda», no es probable que estas propiedades vuelvan a Gorrín en un futuro próximo. Incluso si Caballero no logra demostrar que Gorrín es un «agente o instrumento» de las FARC, todas sus propiedades en EEUU han sido congeladas desde 2019 debido a las sanciones.

notiveraz

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