La senadora del Centro Democrático, Piedad Córdoba, dio una entrevista a la revista Cambio. Respondió preguntas sobre su hermano detenido por presunto narcotráfico y la investigación que se le sigue en Honduras. También habló de su relación con Alex Saab, a quien niega cuatro veces.
Piedad Córdoba, la dirigente política colombiana, senadora por el Centro Democrático, negó cuatro veces en una entrevista su cercanía con Alex Saab, empresario extraditado a EE. UU. a quien vinculó con el hoy ministro de Energía y Petróleo, Tareck El Aissami, pues “ellos se dicen primos”.
En la entrevista con la revista Cambio, publicada este domingo, 6 de noviembre, en la página web, respondió cuatro preguntas y en todas descartó que ella tuviera un papel importante en los vínculos que Saab, empresario barranquillero, estableció con el oficialismo venezolano.
Al abordar el tema Venezuela, el periodista Alfredo Molano Jimeno le preguntó sobre su relación con Venezuela y los señalamientos de su cercanía con Alex Saab. Sobre este punto comentó que lo conoció en Barranquilla durante la última campaña presidencial de Horacio Serpa. “Yo sí era muy amiga del papá, porque he hecho parte de los grupos de apoyo a Palestina. Entonces, pues nos saludábamos con mucho cariño. Ese día conocí a Alex”.
Agregó que tiempo después se lo encontró en el hotel Meliá y tiempo más tarde lo vio en un evento en el que estaban los presidentes Hugo Chávez y Juan Manuel Santos, junto a empresarios colombianos.
“Era un escenario de empresarios, y el presidente Chávez llama a Alex Saab a la tarima y firman un contrato de casas, pero no conocí mucho de eso”. Luego le hicieron dos preguntas para ahondar más en su responsabilidad en el protagonismo alcanzado por Saab en Venezuela.
—“CAMBIO: ¿Pero usted presentó a Alex Saab con Hugo Chávez?
—P.C.: No, yo no. Si lo hubiera presentado, lo lógico es que yo hubiera estado en la firma de ese contrato. Yo no sé cómo llegó a Venezuela. Presumo que por la colonia. Presumo que algo pudo tener con Tareck El Aissami porque ellos se dicen primos, no sé si lo son o no. Pienso que por ahí fue la relación. Alex era un empresario muy reconocido en Barranquilla, de una familia de empresarios. Pero reitero: yo en eso no tengo nada que ver. El presidente Santos podrá decirlo o desmentirme. Yo jamás se lo presenté a Chávez, ni al presidente Maduro y no puedo decir nada más. No sabía que era diplomático ni que tenía una actividad tan importante en la economía de Venezuela.
—CAMBIO: ¿Cómo explicar que una persona tan cercana al gobierno de Venezuela no tuviera relación con el principal empresario colombiano…?
—P.C.: Pero es que yo no hago negocios. Yo hablaba era con el presidente Chávez y no con Nicolás Maduro, pero nunca para hacer negocios, ni contratos, mi cercanía ha sido ideológica. A mí lo que me interesa es la defensa de los derechos humanos y la promoción de la paz. Soy una dirigente política. Pero yo no puedo decir que me encontraba con Alex cada vez que iba a Venezuela, porque Alex es un tipo de muy buenas maneras pero hermético. Entonces yo no tuve nunca una relación personal. No conozco su casa en Venezuela. Jamás puse los pies en la oficina de él. Y en esto de Alex Saab digo como el comandante Fidel: la historia me absolverá”.
Córdoba negó también que en algún momento haya recibido un millón de dólares de Alex Saab en efectivo, como lo presenta el maestro del periodismo de investigación Gerardo Reyes en su último libro: Alex Saab, la verdad sobre el empresario que se hizo multimillonario a la sombra de Nicolás Maduro.
“Es absolutamente falso, y es la versión de Andrés Vázquez, quien era casi como un hijo y fue asesor. Él dice que me reunía con empresarios, y eso no pasó. Y fuera de eso, dice una cosa absurda, y es que yo era intermediaria de Alex, y que las comisiones me las entregaban a mí”, afirmó la senadora del Centro Democrático.
En febrero de este año, Reyes, en entrevista con El Pitazo, aseguró que Piedad Córdoba acercó a Alex Saab al círculo íntimo de Nicolás Maduro:
“Piedad Córdoba fue la madrina política de Alex Saab en Venezuela para recuperar 30 millones de dólares que había invertido en exportaciones, en su mayoría ficticias, según el Gobierno de Estados Unidos. Ella le fue abriendo caminos para que llegara a la cima del poder, para que hablara con Maduro, y lograr que el dinero represado por una disputa de momento entre Hugo Chávez y Alvaro Uribe Vélez, lo recuperara. Pero no solo lo recuperó, sino que Saab fue tomando impulso a través de Piedad Córdoba y se fue metiendo en otros asuntos hasta convertirse en una especie de ministro de cartera plenipotenciario, que era buscado por el gobierno para solucionar los problemas ocasionados por las sanciones económicas de Estados Unidos.
“Su posición, al principio, era que Saab era un simple conocido; pero con las pruebas que le mostré, aceptó incluso que pasó una noche en una mansión de Saab en París y que al día siguiente utilizó la tarjeta de crédito de su esposa para hacer compras”, precisó en esa entrevista el maestro del periodismo de investigación Gerardo Reyes.
En la misma entrevista, Córdoba respondió preguntas sobre la detención de su hermano Álvaro Córdoba, por presunto narcotráfico, así como por el caso que se le sigue en Honduras, donde le confiscaron 68.000 dólares en efectivo cuando trataba de tomar un avión.
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