Tras las críticas y dudas que se han originado por la publicación de una carta enviada por 25 opositores al presidente de Estados, Joe Biden , en la que instan a flexibilizar las sanciones financieras a Venezuela, el economista Francisco Rodríguez justificó su firma en el documento.
En un hilo compartido en su cuenta en la red social Twitter, Rodríguez comienza respondiendo a un usuario que el “debate de ideas es esencia de la democracia y, por tanto, debe serlo también de la lucha por recuperarla”.
En ese sentido, aclara que “en ningún momento la carta que suscribimos 25 venezolanos sugiere que la flexibilización de sanciones cambiará los objetivos de Maduro, ni lo hará negociar de buena fe. Lo que planteamos es que es posible llegar a acuerdos para aliviar la emergencia humanitaria”.
El economista considera que el gobierno de Maduro es un proyecto político con pretensiones hegemónicas. Por tal razón, señala que emplean cualquier iniciativa para tratar de adelantar esa “ambición”.
“Mi planteamiento es que, aún en este contexto, se pueden utilizar las negociaciones para acordar reglas de confrontación que permitan proteger a los venezolanos del daño colateral que la crisis de gobernabilidad genera a la economía venezolana”, argumentó.
Rodríguez añadió que esos “espacios de negociación pueden servir para modelar la cooperación entre actores políticos y superar el dilema del juego suma-cero que contribuye a la polarización política”. “Así se pueden generar iniciativas que permiten atender problemas urgentes de los venezolanos”, sostuvo.
Puntualizó que desde el organismo que preside, Oil For Venezuela, insisten en buscar mecanismo que permitan recuperar el acceso a mercados petroleros, pero con la condición de que los recursos se usen bajo supervisión internacional y se destinen a atender la crisis humanitaria que afronta la nación.
“Entiendo la preocupación de quienes piensan que la flexibilización de sanciones puede debilitar la lucha por la democracia. Sin embargo, creo que la evidencia muestra claramente que las sanciones económicas no ayudan a cambiar sistemas políticos y pueden ser contraproducentes”, dijo.
Por tal razón, extendió una invitación al liderazgo opositor para que consideren “estrategias que no se basen en la presión económica cuyos costos recaen sobre los más vulnerables. Sugiero considerar el ejemplo de la oposición polaca, que pidió a Reagan el levantamiento de sanciones”.
“Invito a una discusión ponderada sobre la estrategia que debemos adoptar para rescatar la democracia y proteger a los venezolanos más vulnerables de los efectos de la confrontación política. Es hora de repensar un enfoque que claramente no está funcionando”, concluyó Rodríguez.
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