La periodista Sebastiana Barráez informó que Javier Tarazona está detenido porque los organismos de seguridad del Estado «le montaron un expediente», y señala que «la guinda» fue la foto que mostró, donde exministro del Interior, Ramón Rodríguez Chacín, aparece junto a jefes del ELN.
El 30 de junio de 2021, Javier Tarazona, director de FundaRedes, acudió ante la Fiscalía General, en Caracas. Lo hizo para solicitar que se investigue “la relación de altos funcionarios que han ejercido el poder en Venezuela, tanto militares como civiles”, con altos mandos de la guerrilla.
Tarazona mostó una gráfica en la cual estaba, entre estos funcionarios, el exgobernador de Guárico y exministro del Interior, Ramón Rodríguez Chacín.
Para la periodista Sebastiana Barráez, esto «desató la furia del alto gobierno en Venezuela». Y explica que esto ocurre porque «hay gran cantidad de líderes de la revolución bolivariana con trato personal, económico y sentimental con los grupos irregulares».
Destaca que «después, Tarazona junto a dos activistas de la ONG fueron detenidos por el Sebin». Y finalmente, este sábado, «un tribunal de terrorismo los imputó por instigación al odio, terrorismo y traición a la patria”.
El expediente
La comunicadore relata que «los cuerpos de inteligencia sustentan un expediente contra el coordinador de Fundaredes desde hace meses».
Dice que «lo seguían, lo grababan, monitoreaban a los miembros de la organización y a los familiares de Tarazona».
Pero «no encontraban nada, porque él actuaba públicamente. Incluso fue a la Fiscalía de San Cristóbal hace unos días para averiguar sobre las denuncias hechas y que ahí fingían procesar».
Asimismo, «diariamente asistía a la oficina de Fundaredes y con frecuencia iba a tomar café a varias panaderías».
Sin embargo, «la denuncia contra uno de los hombres más poderosos en la sombra del chavismo hizo estallar la furia y ordenaron detenerlo, lo que hicieron junto a su hermano y dos activistas».
Barráez cita al portal de propaganda chavista, La Tabla. Allí explicaron las razones de la detención de Tarazona.
“La aprehensión del propagandista de la derecha uribista colombiana, Javier Tarazona, que actúa en Venezuela a través de entidad paraestatal Fundaredes, fue consecuencia de una investigación penal de la fiscalía 94°, con competencia nacional, por el delito de instigación al odio”, dice la publicación.
El portal agrega: “Tarazona, quien reside en Táchira, había permanecido los últimos meses en el Norte de Santander. Pero el miércoles, tras el anuncio de la visita a Bogotá del director de la CIA, William Burns, retornó a territorio venezolano. Esto alertó a los servicios de inteligencia local”.
Según la periodista, «esa versión retorcida del medio LaTabla busca relacionar al defensor de derechos humanos con pagos de agencias de inteligencia norteamericana».
También «con el expresidente de Colombia Álvaro Uribe Vélez y otros funcionarios. Miente el medio, porque es notorio, público y comunicacional que Tarazona sostuvo reuniones casi a diario en San Cristóbal, capital del Táchira, con diversas organizaciones».
“Él dejó de ir a Colombia porque desde hace tiempo solo se puede pasar la frontera a través de las trochas, que están controladas por el ELN. Imagínate el peligro que eso significa. Es falso, él estuvo todo el tiempo aquí”, le dijo a Barráez un miembro de FundaRedes en Táchira.
Denuncia directa
«¿Por qué esa denuncia es particularmente sensible?», pregunta la comunicadora, en referencia a la foto mostrada por Tarazona, donde aparece Rodríguez Chacín.
«Porque fue una denuncia directa contra uno de los hombres más poderosos que ha tenido la revolución bolivariana. El silencioso capitán de navío Ramón Emilio Rodríguez Chacín», respondio.
En la fotografía, describe Barráez, «aparecen sentados alrededor de una mesa, que preside Rodríguez Chacín y junto a él su esposa Carola. También los jefes guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN)».
Allí está «Nicolás Rodríguez Bautista, alias Gabino, quien hasta hace unos días fue el máximo jefe e integrante del Comando Central del ELN (COCE-ELN). Eliécer Herlinto Chamorro Acosta, alias Antonio García, máximo jefe de la organización guerrillera». Y aparece «Israel Ramírez Pineda alias Pablo Beltrán, miembro del Comando Central del ELN».
La detención de Javier Tarazona, «es una respuesta feroz contra la organización». Lo es «por develar una prueba determinante, no solo de la presencia de la guerrilla colombiana en territorio venezolano». Pero, además «se convierte en un acto ejemplarizante contra quienes se atrevan a señalar la presencia de los grupos guerrilleros en territorio venezolano», resalta la comunicadora.
La investigación
Cuando Tarazona hizo la denuncia y mostró la foto, no solo pidió investigar «la relación de Ramón Rodríguez Chacín y su esposa Carola de Rodríguez, con los cabecillas del COCE-ELN». También «solicitó que se investigue la participación de los esposos Rodríguez Chacín en las casas de resguardo de la guerrilla».
Discreto y peligroso
«Discreto y peligroso». Así describe a Rodríguez Chacín un hombre que también fue parte del Gobierno de Hugo Chávez y que habló con Barráez. “El presidente Chávez decía que Ramón era como ‘un perro leal’ y así se comportó con él», señala la fuente de Barraéz.
Añade que Chacín «es profundamente desconfiado, no vacila si se siente en peligro y eso lo hace muy peligroso. Así también te digo que se restea con los amigos, eso se lo ha facilitado que no tiene compromiso ideológico. Ayer era el más feroz antiguerrillero y hoy es amigo de la guerrilla. No sé si eso explica cómo es él. Se ve a sí mismo como un rambo. ¿Su debilidad? Aunque sé que te parecerá raro, pero su debilidad no son sus hijos, es su esposa Carola Martínez de Rodríguez”, remarca el entrevistado de Barráez.
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